Técnicos de la Mesa de Sanidad Agropecuaria y Clima indicaron que uno de los riesgos en la región puede ser el incremento de poblaciones de Shistocerca piceifrons piceifrons.
El OIRSA fue parte del 49ª Foro de Aplicación de los Pronósticos Climáticos a la Seguridad Alimentaria y Nutricional, perspectivas de mayo a julio de 2023, en el que coordinó la mesa de Sanidad Agropecuaria y Clima. El foro se realizó, en modalidad virtual, el 18 y 19 de abril de 2023 y en el mismo se contó con la participación de técnicos de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá.
Con un 80% de probabilidad que, de mayo a julio del año 2023, el fenómeno de El Niño -Oscilación del Sur se mantenga en una fase neutra, se proyectan precipitaciones arriba del promedio en áreas de Guatemala y déficit de lluvia en el oriente y zona costera de El Salvador, sur y norte de Honduras y Caribe de Costa Rica.
En base a este pronóstico de lluvias, se determinó que uno de los principales riesgos a la Sanidad Vegetal lo constituye el incremento de poblaciones de langosta voladora, por lo que es fundamental el refuerzo de las actividades de vigilancia. Son relevantes también las poblaciones de moscas de la fruta, la presencia del pulgón amarillo del sorgo, chinche salivosa de los pastos y el vector del HLB, Diaphorina citri.
Mientras que, en términos de Salud Animal, los principales riesgos están asociados a la saturación de los suelos por el incremento de las precipitaciones. Para bovinos, ovinos y caprinos, los principales riesgos son las enfermedades del tipo clostridial.